Recordando al Padre Francisco Gonzalez Pedraz

 

Hoy honramos la vida de un sacerdote único y querido, cuya entrega y amor por su comunidad dejaron una huella imborrable en nuestros corazones. Hombre culto y sabio, dedicó su vida no solo a la fe, sino también al servicio de los demás, iluminando el camino con su profundo conocimiento y su pasión por el bien común. Le encantaba la política, porque veía en ella un medio para transformar el mundo a la luz del Evangelio, defendiendo siempre la dignidad de cada persona y los valores cristianos.

Padre Francisco Gonzalez Pedraz.

Su voz era firme y su consejo, invaluable. No solo nos hablaba de Dios, sino que nos inspiraba a buscarlo en cada aspecto de la vida. Con su ejemplo, nos enseñó que la fe y el compromiso social pueden y deben ir de la mano, recordándonos siempre que el amor al prójimo es el mayor testimonio de la caridad cristiana.

El Padre Francisco González Pedraz nace en Oviedo, Capital del Principado de Asturias, España, el 04 de abril de 1930 y fallece en la Ciudad de Guatemala, el 22 de enero de 2019, a la edad de 88 años . Fue hijo de Ángel González García y de Caridad Pedraz Casariego.

Tuvo tres hermanos, quienes son: Ángel, Blanquita y Maribel, la menor, quien radica actualmente junto a su esposo en Ponferrada, ciudad en la provincia de León, España. Sus sobrinos y demás familia viven en las provincias de León, Asturias y en Barcelona (Cataluña).

Fue ordenado Sacerdote Dominico el 04 de abril del año 1955, en su ciudad natal, Oviedo; lugar donde cantó su primera misa.

En el año de 1955 inicia sus estudios Sacerdotales Superiores, terminando los mismos en el año de 1957.

En el año 1958 asiste a la Universidad Laboral de Córdova.

El Padre Pedráz inicia su Ministerio Sacerdotal cuando es enviado por la orden Dominica a San José, Costa Rica en Centroamérica, lugar donde radica y ejerce el Sacerdocio por 12 años y luego es enviado a la Ciudad de Guatemala, donde nuevamente radica y ejerce por más de 42 años, celebrando sus bodas de Plata Sacerdotales en el mes de  Mayo del año 1981, en la Iglesia Inmaculada de Tívoli para luego, 25 años después, celebrar sus Bodas de Oro Sacerdotales en el país, en el año 2005, ya en su propia obra, la Iglesia y Guardería Infantil Virgen del Camino, junto con la comunidad  y feligreses de la misma.

Guardería Virgen del Camino zona 13.

Muchos años  antes de construir la Guardería, en estos barrios marginales (Reina Barrios, Forestal y Plaza de Toros) realizó varias obras sociales como son:

• Proyecto y construcción de casitas para los más necesitados.
• Drenajes y asfalto en las colonia  Forestal y Reyna Barrios.
• Programas de alimentos y capacitación para madres y mujeres solteras.
• Programas de Navidad para adultos y niños.

Prueba de su agradecimiento, los vecinos de las colonias mencionadas, erigieron un pequeño monumento  en el centro de la Colonia Reyna Barrios, así como muchos otros reconocimientos que le han otorgado Empresas, familias, Instituciones de Gobierno, Iglesia y otras organizaciones en gratitud a su desinteresada labor por los más necesitados.

Además de todo lo citado, el Padre Francisco Pedráz siempre fue un entusiasta de todas aquellas actividades que enaltezcan y desarrollen  mente, cuerpo y alma; es por esto que siempre ha prestado sin ningún interés el salón social de la Guardería Virgen del Camino, para eventos diversos que recrean y engrandecen a la Comunidad, evangelizando integralmente, no solamente alma, sino cuerpo también y por ende salud física y mental, pues el Padre como buen entendedor de filosofía, siempre creyó la célebre frase de “mens sana in corpore sano” o “mente sana en cuerpo sano” atribuida al gran Filósofo Aristóteles; entre los mencionados eventos podemos citar algunos como: 

• Reuniones de los habitantes de las colonias de alrededores de la Iglesia con la PNC (Policía Nacional Civil) para temas de cómo protegerse mejor.
• Reuniones de los vecinos con la PMT (Policía Municipal de Tránsito) para mejorar el ornato, vías de acceso y todo lo relacionado a mejorar los alrededores; así como para bingos, celebraciones sociales y prácticas deportivas, como haber prestado el salón por un año para introducir el Arte Marcial Aikido y su consecuente práctica y desarrollo en Guatemala. A su vez instaló una rampa para deportes extremos como “Skateboarding” y patinaje convencional.